miércoles, febrero 14, 2018
CRÓNICA VISITA COSMÉTICOS OLEA
CRÓNICA VISITA COSMÉTICOS OLEA
10 DE FEBRERO 2018
Aunque el día se encontraba despejado, la mañana era fría, un viento helado sacudía las cabelleras de los miembros del CLUB MERCEDES CLASICOS DE ANDALUCÍA, y del Club de VETERANOS que nos acompañaban y que nos habíamos congregado en el punto de salida para acudir a la visita de la Fábrica de Cosméticos Olea en Pegalajar.
Llegada la hora prevista el Sr. Presidente llamó al orden a los presentes para dar comienzo a la ruta.
A unos 50 km. Nos detuvimos en el Restaurante “El Zegrí”, donde degustamos un apetitoso desayuno
Proseguimos nuestra ruta hacia la población de Pegalajar, y atravesando la población que nos sorpendió por su extraordinario enclave, llegamos a las inmediaciones de nuestro destino, aparcando nuestros vehiculos en una explanada frente a la ubicación de la flabrica, pudiendo sifrutar de unas panorámicas impresionantes, observando los picos de las montañas circundantes completamente nevados y disfrutando de una suave y helada brisa que nos obligaba a buscar las recachas bañadass por en agradable sol.
Fuimos recibidos por un grupo de 4 encantadoras señoras que formaban el nucleo empresarial de la Fábrica de Cosméticos, que expusioren los avatares de la formación de la empresa y ofrecieron una amplia información de los objetivos de la misma.
Finalizado el turno de preguntas y tras realizar algunas compras de los productos que nos ofrecieron, abandonamos el recinto para dirigirnos a un parage próximo, punto de lanzamiento de los aficionados al Parapente y cuyas impresionantes vistas de parte de la Provincia de Jaen hicieron las delicias de los asistentes, rodeados de zonas nevadas y disfrutando de un vientecillo gélido que combatimos con el extraordinario néctar que nos ofreció la “inestimable BOTA” de Antonio Molina, que en esta ocasión fue muy bien recibida y que contribuyó de forma extraordinaria a mitigar la sensación que las bajas temperaturas de la zona producían en nuestros rostros.
Seguimos nuestro viaje para dirigirnos al Restaurente “Cueva de los Majuelos”.
Todos nos quedamos maravillados por la sensación que nos produjo el local. Una magnífica “CUEVA” oradada en la roca, de aspecto impresionante y almismo tiempo acogedora.
Las mesas estaban distribuidas en dos grupos consecutivos acomodados a lo largo del lateral derecho. Una iluminación suave y muy agradable completaba la dercoración. Finalizada la degustación de un magnífico almuerzo fuimos sorprendidos con una pequeña celebración del cumpleaños de nuestro amigo Enrique.
Una vez degustada la tarta acompañada con una copita de sidra dimos por finalizada la salida y partimos a nuestros puntos de destino.
Fuente:F. Torres